Ejercicio para sanar a tu niña interior: Sigue estos pasos y conversa con tu pasado

Ciudad de México.- Mucho se escucha sobre la relevancia que tienen las heridas de la infancia en las cosas que ocurren en el presente, la personalidad de la gente y su forma de enfrentar los problemas. Sin embargo, nadie habla de que también se puede resignificar esas marcas del pasado desde el ahora. Por eso, aquí encontrarás un breve ejercicio que deberás hacer si buscas sanar a esa niña que llevas en tu interior.

Sanar las heridas de tu niña interior es fundamental para construir una nueva vida en equilibrio, reparar cosas que te duelen y no repetir patrones a causa de ese dolor.

Se trata de utilizar las herramientas que tiene la persona adulta que ahora eres, pues cuando eras pequeña no contabas con todos estos saberes y conocimientos. Además, no hay mejor persona para calmar a esa niña que tú misma, pues conoces sus necesidades y miedos. Así que este ejercicio te ayudará a conectar con esa parte de ti; guíate con los siguientes pasos.

• Imagina tu niñez

¿Cómo eras de niña? ¿Qué rasgos te identificaban? Puedes ayudarte de una fotografía, si te cuesta trabajo recordarte en esa etapa.

• Visualiza e imagina

Mira esa etapa como si la estuvieras viviendo, como si fuera una película. Trata de enlazar detalles del entorno y sensaciones que lograbas reconocer en ese entonces; entre más real sea la imagen que crees, mejor.

• Vuelve al presente

Ahora imagínate tal y como eres en tu vida adulta. Imagina que entras a la misma habitación de tu niñez y te encuentras con esa niña que eras en el pasado.

• Abraza a tu niña interior

Entabla una conversación con esa niña desde tu experiencia y escúchala. Trátala con mucho amor, compasión y comprensión. Pregúntale qué necesita, hazle saber que no está sola y que tú la proteges; dale lo que necesita, lo que tú hubieras necesitado en tu niñez.

• La despedida

Una vez que logres que esa niña se sienta feliz y con tu compañía, despídete de ella y hazle saber que estarás ahí cada vez que te necesite. Recuérdale lo amada e importante que es y agradécele por convertirse en lo que eres ahora.

Es un ejercicio que te ayudará a construir esa paz con tu niña interior y puede llevarte solo unos minutos. Puedes volver cada vez que necesites para sentirte tranquila, es un proceso que puede llevar más de un solo acercamiento. Recuerda que estos ejercicios de autocuidado son necesarios para ir logrando una paz interior, no los subestimes.

Fuente: Instagram @mpblanco