¿Qué es la tristeza del domingo por la noche? Te contamos de qué se trata y por qué ocurre

Ciudad de México.- Para muchas personas el fin de semana es sinónimo de libertad, tranquilidad y actividades en familia o con amigos. Pero incluso si has planeado el mejor fin de semana del año, siempre hay una desaceleración cuando llega el final. Nerviosismo, depresión, nudo en el estómago... ¿Sufres de tristeza del domingo por la noche? 

Es una mezcla de profundo aburrimiento y preocupación lo que provoca una incapacidad para disfrutar el momento presente y divertirse los domingos. Los síntomas pueden incluso volverse físicos con tensión que va desde simples espasmos faciales hasta dolores musculares y digestivos. Si no hay estudios propiamente dichos sobre el tema, esta tristeza sería frecuente. Según las distintas encuestas que se han realizado sobre este fenómeno, alrededor del 50 por ciento de las personas ya han sentido esta sensación específica de malestar al final del fin de semana.

El trabajo puede ser un detonante

Muchas razones pueden explicar este momento de depresión al final del fin de semana. El más obvio es, por supuesto, la aprensión del lunes y un nuevo comienzo de la semana y la rutina laboral. Si tu tristeza del domingo por la noche está relacionada con el trabajo, varias causas más específicas pueden aumentar su riesgo de sufrirla.

Si te falta organización: los fines de semana tendemos a querer posponer las tareas vinculantes, ya sean profesionales o personales. El domingo por la noche también existe la perspectiva bastante desagradable de tener que encargarse de todas estas tareas al mismo tiempo.

Si eres sensible a los cambios de ritmo: algunas personas tienen un reloj interno especialmente bien regulado y puede resultar difícil escapar de sus hábitos. Levantarse más tarde de lo habitual, no seguir siempre la rutina matutina o no planificar muchas actividades puede hacer que el fin de semana se sienta improductivo. Cuanto más avanza el día, menos quieren (los afectados) realizar actividades ya que empieza a ser demasiado tarde para empezar algo.

El trabajo en sí: si la tristeza del domingo por la noche regresa cada semana, acompañada de una forma de ansiedad ante la sola idea de regresar a su escritorio, esto puede ser un signo de un problema más profundo. Tu estrés por regresar puede ser una señal de que algo ya no te conviene. Ya sea la gestión, las misiones o el entorno en el que opera, es posible que el agotamiento le esté esperando.

Fuente: Todo para Ellas