Evita lesiones en rodillas y tobillos durante una carrera; sigue estas medidas de cuidado

Ciudad de México.- Correr supone un esfuerzo para tus articulaciones, pero hay algunos trucos que puedes utilizar para limitar el daño. En Todo para Ellas te compartimos algunos consejos para cuidar tus rodillas y tobillos.

1.- Calentamiento.

Esta es la fase esencial antes de la sesión de carrera. Empieza a caminar a paso ligero durante cinco minutos, este acondicionamiento de las articulaciones y los músculos es esencial para preparar el cuerpo para el esfuerzo que vendrá después.

2.- Estiramiento posterior.

Si nunca estiras antes de una sesión deportiva, es importante que lo hagas cuando termines. De este modo, los músculos utilizados se aliviarán más rápidamente y se reducirán los dolores. Hay algunos ejercicios muy sencillos. Para las rodillas: de pie o tumbada boca abajo, dobla la pierna derecha y llévala hacia atrás con las manos hasta que el talón toque las nalgas. Mantén la posición, no levantes la pelvis y cambia a la pierna izquierda. Repite el ejercicio 10 veces de cada lado. Para los tobillos: la idea es relajar el tendón de Aquiles con suavidad y sin forzarlo. Coloca la parte delantera del pie en un peldaño de la escalera, baja el talón lentamente y vuelve a subirlo. Repite el ejercicio 10 veces con cada pie.

3.- Marca el ritmo adecuado en función del terreno.

Al igual que el desgaste de un neumático de coche, es el impacto que experimentas (cinco a ocho veces tu peso corporal en cada zancada) lo que daña tus articulaciones. Así que sé razonable y limita la carrera a 30 minutos al principio. Mejor aún, alterna la carrera y la caminata rápida. Elige un suelo blando para la amortiguación, por ejemplo, un bosque.

4.- Comprar el calzado adecuado.

La calidad debe primar sobre la moda. Así que olvídate de los tenis de moda firmadas por distinguidos diseñadores. Es mejor correr con unos tenis adecuados. Esta es la única manera de evitar lesiones. El zapato sirve para estabilizar el pie y absorber los impactos. Por eso es importante elegirlos bien. Lo mejor es buscar asesoramiento en tiendas especializadas. Muchos de ellos ofrecen un análisis de la posición. De acuerdo con la figura de tu pie, podrás conseguir los que mejor se adapten a ti.

5.- Tomar vitamina D.

Para fortalecer el cartílago y limitar el desgaste, necesitas calcio. La vitamina D ayuda bastante. Puedes optar por suplementos en ampolletas, gotas, etc.  También puedes llenar tu plato de salmón, huevos, setas. Pide siempre consejo a un médico.

Fuente: Todo para Ellas