Baño

¿Mamá primeriza? Guía para bañar a un recién nacido de manera segura y sin complicaciones

Es cierto que nos puede asustar enfrentarnos a esta situación por primera vez. Pero con un poco de información será pan comido bañar a tu bebé. Hazlo con todas las medidas de seguridad y confianza
miércoles, 3 de mayo de 2023 · 15:33

Ciudad de México.- Tras la llegada del bebé, uno de los grandes retos de los padres es bañar al recién nacido. La tarea requiere cuidado, ya que el niño aún no es capaz de sentarse solo, pero no es tan complicado como parece. Hoy queremos compartir contigo algunos consejos para ayudar con el baño del recién nacido. Mira cuáles son a continuación:

  • Lugar donde bañar: debe ser con suficiente espacio para moverse sin dificultad. Además, las puertas y ventanas deben estar cerradas para mantener el ambiente cálido, especialmente en los días fríos.
  • Temperatura del agua: debe estar entre 36°C y 37°C. Antes de poner al recién nacido en el agua, es importante usar un termómetro o antebrazo para verificar la temperatura del agua, nunca el codo, pues tenemos menos sensibilidad en el codo, por lo que no se puede usar para analizar la temperatura del agua.
  • Cantidad de agua: debe estar al nivel del ombligo con el recién nacido en posición acostada. También se recomienda dejar todo lo necesario para el baño al alcance de la mano.
  • Empezar por la cabeza: primero hay que lavar la cabeza del recién nacido, luego seguir con el resto del cuerpo.
  • El baño debe ser rápido para que no se enfríe el agua. Además, no debes dejar al bebé solo ni por un segundo.
  • Momento ideal: no existe un momento perfecto. El momento ideal es cuando el cuidador está más disponible. No obstante, recordamos que en los meses de frío, hay que elegir el momento del día más caluroso. 
  • Productos específicos para bebés: utiliza productos específicos para bebés y prefiera jabones líquidos con un pH más ácido (más cercano al pH de nuestra piel), que se puedan usar de pies a cabeza. Los champús solo se pueden usar a partir de los 6 meses de vida.

No omitas el uso de humectantes para bebés. Estos se pueden usar después del baño, siempre que sean inodoros y sin colorantes. En cuanto a los polvos de talco, es mejor evitarlos, ya que secan la piel y suponen un riesgo de aspiración.

¿Cómo bañar a un recién nacido?

1.-  Coloca el brazo alrededor de la espalda del bebé y mételo debajo del brazo del bebé, apoyando la cabeza del bebé en y tu antebrazo.

2.- Sostén las nalgas y los muslos del bebé con la mano derecha (invierte las manos si eres zurda), mételo lentamente en el agua y suéltalo solo cuando se sienta seguro en la bañera. Enjuaga el frente del bebé con tu mano derecha y descansa su espalda contra tu brazo izquierdo.

3.- Comienza el baño del bebé lavándole la cara. Si hay mucosidad seca acumulada en las comisuras de las fosas nasales o los ojos, humedece el área varias veces hasta que la secreción se ablande y solo entonces retírala. Luego lava las otras partes del cuerpo, dejando el cabello, que debe frotarse ligeramente, en último lugar. Elige un champú especial para los más pequeños, ya que estos no provocan ardor en los ojos si cae en la cara.

4.-  La región genital, que es la puerta de entrada a diversas enfermedades, debe recibir un cuidado especial en relación con otras partes del cuerpo. En las niñas, se deben lavar los labios mayores y menores, la región perianal (la parte debajo de la vulva que se extiende hasta el ano) y todos los pliegues con agua y jabón. Los niños de hasta cuatro meses pueden tener fimosis fisiológica (que desaparece naturalmente), es decir, no pueden exponer el glande, por lo que es necesario lavar el prepucio sin forzar el desprendimiento del glande. Asegúrate de lavar las regiones escrotal y perianal (entre el escroto y el ano), así como los pliegues.

5.- Cuando termines de bañar el frente, dale la vuelta. Usa tu mano derecha para dar vuelta al bebé de modo que tu brazo izquierdo sostenga el pecho y la cara del bebé. En esa posición, la mano izquierda quedará atrapada debajo de tu brazo derecho. Luego simplemente enjuaga al niño.

Fuente: Todo para Ellas