Le grité a mi hijo y me siento mal: Acciones que puedes hacer para remediar la situación

Ciudad de México.- Nadie es perfecta y en ocasiones podemos perder la paciencia y dejarnos cegar por las emociones que sentimos al instante. Lo importante es saber cómo solucionar las consecuencias, por ejemplo, cuando no tuviste control en una situación que involucraba a tu hijo y terminaste gritándole. 

Desde luego, lo recomendable es evitar este tipo de escenarios y, por el contrario, recurrir a la disciplina positiva. Habrá días en los que te veas superada por el estrés y la tensión, lo que te llevará a levantarle la voz a tu pequeño. Sabemos que de ninguna manera tu intensión será lastimarlo, por desgracia, esto puede ocurrir aún cuando no lo queramos. 

¿Cómo consolar a tu hijo y lo reprendiste mediante gritos?

Es importante mostrarse vulnerables y que los niños comprendan que las personas cometen errores, pero que también pueden aceptar los fallos y ofrecer una disculpa. Antes de acercarte a él o ella, asegúrate de haberte tranquilizado primero. Resulta ilógico intentar solucionar el conflicto cuando aún te encuentras exaltada. Tómate cinco minutos para respirar y luego pregúntale si se siente preparado para conversar contigo. 

Durante la charla, ponte en su lugar. Puede ser que desde tu perspectiva, ese pequeño grito o frase que le dijiste fue inofensiva, no obstante, a él pudo haberlo herido. Pregúntale cómo se sintió y trata de ser empática con sus emociones e ideas. Después, repara el daño y ofrécele disculpas, así como opciones para resarcir el daño. Finalmente, sé congruente y cumple con tu palabra. Si prometiste no volver a gritar, hazlo. 

Fuente: Todo para ellas