Forma niños exitosos y disciplinados con el método de crianza japonés

Ciudad de México.- En los hogares japoneses predomina la disciplina durante la crianza, así como el apego de los padres hacia los menores para así poder vigilar los comportamientos. Además, la familia se encarga de orientar a los niños hacia el éxito, dejando de lado la pereza que suele interponerse en el camino y lo logran gracias al método de educación. Si te interesa, te invitamos a leer los pasos que conforman el modelo.

Primero, traza un rutina. Ésta servirá para optimizar los tiempos y realizar todas las actividades. Al practicar constantemente las mismas tareas, aumenta la habilidad para completarlas y la eficiencia. Una rutina bien pensada y ejecutada incluso deja un margen para abordar algunos imprevistos. Saber el paso a paso de tu día te permitirá distribuir bien la energía, lo que refuerza el control que tienes en tu vida. 

Comienza de a poco. Incítalos a tender su cama, después sacar la basura y otros proyectos acorde a su edad. También súmales intención a las actividades, es decir, explícales porqué es importante realizarlas y cuál es el beneficio que aportan. Por ejemplo, acomodar las cobijas de su cama les permitirá descansar mejor por la noche.

En segundo lugar, demuéstrales reconocimiento. Al valorar los logros de los niños, se cuida su autoestima y se les motiva a que continúen cumpliendo con sus deberes. En este sentido, evita emitir comentarios negativos o descalificarlos. Recuerda que todos tenemos derecho a equivocarnos. En su lugar, guíalo en el proceso y enséñalo a remediar una situación y a mejorarla.  

Por otra parte, se recomienda enseñar con ejemplos y ser coherente con lo que se predica y lo que se practica. Ten en cuenta que las acciones que llevas a cabo repercuten en el comportamiento del niño. Si como padres les indicamos que deben de recoger su plato de la mesa y llevarlo al fregadero cuando terminen de comer, pero como adultos no lo hacemos, al menos se le dificultará tomar en serio esta actividad. 

Fuente: Todo para ellas