Familia
Por qué aceptar que la maternidad es complicada y pedir ayuda te hace buena madre
Este es el motivo por el cual aceptar que la maternidad no es un cuento de hadas, es una de las principales claves que te hacen ser buena madreCiudad de México.- Seguramente has escuchado una gran cantidad de comentarios asegurando que ser madre es una de las mejores experiencias que le puede ocurrir a una mujer, sin embargo, no compartir está opinión no estaría mal, pues no hay duda alguna que cuidar de un bebé es una actividad agotadora que puede causar muchos cambios en la estabilidad mental, por lo que aceptar que la maternidad es complicada no es algo malo, a pesar de que es común solo presumir las cosas buenas que suceden durante este momento en la vida.
Aunque la maternidad tiene vivencias que son especiales y únicas, aceptar que ser madre es complicado y agotador es bueno e incluso sería la mejor manera de convertir en una buena madre, pues aceptar que se tiene dificultades es el primer paso para cuidar de ti misma, pues no es posible estar al pendiente de tu pequeña o pequeño si tu salud mental se está viendo afectada, puesto que el cuerpo no está listo para enfrentarse a la responsabilidad que un bebé representa.
En este sentido, aceptar que no la estás pasando bien es algo bueno para tu bienestar emocional, pero también para la relación que forjas con tu pequeño, pues no negar que las cosas te sobrepasan en algunos momento será tu principal motivación para pedir ayuda a tu pareja, familiares e incluso a algunos amigos con el cuidado de tu bebé, pues de esta manera tendrás tiempo para hacer cosas que te hagan recuperar tu identidad y tu tranquilidad, lo que será la clave para que disfrutes de la maternidad.
Una de las cosas más importantes que se necesitan recordar al ser madre es que el lado de mujer no se ha perdido, ni ha sido sustituido, por lo cual es importante que tengas siempre presente que tener un momento para ti misma es vital para que esta etapa en la vida no represente una época dolorosa, ya que esto solo creará resentimientos que se verán expuestos en etapas más adelante de la crianza de tus hijos.
Así que es bueno aceptar que no se está bien, pues tener dificultades y pedir ayuda es una clave para convertirte en una buena madre, pues al preocuparte por tu propio bienestar, también estarás teniendo en mente a tu bebé y sus cuidados, así que pierde el miedo e internaliza la idea de que las complicaciones no te hacen ser una mala mamá para tus pequeños.
Fuente: Todo para ellas