Descubre con qué frecuencia se recomienda lavar el peluche de tu hijo

Ciudad de México.- Peluche o un trapo...Da igual lo que los niños consideren su peluche, siempre se ensucia muy rápido. Después de todo, los sigue a todas partes y a veces se arrastra por el suelo. Por desgracia, rápidamente acumula bacterias . Por eso, lavarlo es super importante. ¿Te has preguntado cuál es la frecuencia adecuada para hacerlo? Aquí te contamos.

Nada perdona al peluche de tu hijo: lo chupa, lo muerde, lo deja caer al suelo, etc. Es difícil que este peluche o trozo de tela se mantenga limpio durante más de unos días. Lo peor es que a menudo es así como lo prefiere un niño. Sin embargo, el lavado sigue siendo necesario. 

No esperes a que la pieza empiece a oler mal para lavarla. No hay nada malo en limpiarla regularmente. En promedio, se recomienda hacerlo cuatro veces al mes, aunque puedes repetir la operación si se ensucia a menudo. Primero, llena con agua templada una palangana. A continuación, integra detergente líquido para tejidos delicados. Sumerge el peluche y deja que se empape. Mueve con suavidad para que la suciedad se desprenda. Finalmente, tira el agua jabonosa y enjuaga el peluche hasta que no salga más espuma.

¿Cómo gestionar la separación entre el niño y su peluche? Si es imposible que tu hijo pueda separarse del muñeco y lo deje en tus manos a la hora del lavado y secado, no te desesperes. No dudes en tranquilizarlo o darle otro mientras espera. Para asegurarte de que no se dé cuenta, también puedes ponerlo en la lavadora mientras duerme. Si esto no es posible, intenta hablar con tu pequeñito. Por ejemplo, puedes decirle: "Tu peluche quiere ponerse bonito para ti, pero todavía necesitas un poco de tiempo antes de poder volver a tus brazos".

No olvides fíjate bien en la etiqueta del peluche. En general, la tela no es demasiado frágil, pero sería una pena sacrificar al peluche favorito de tu pequeño por saltarte este paso. Si vas a introducirlo a la lavadora, te sugerimos meterlo en una funda de almohada o bien, en una bolsa protectora especial para la ropa sucia. Por último, para el secado, no dudes en dejarlo al aire libre. Este invierno, puedes ponerlo cerca de una fuente de calor (pero no encima), como un radiador para acelerar el proceso.

Fuente: Todo para Ellas