¿La cerveza engorda? Descubre si esta deliciosa bebida tiene efecto real en tu abdomen

Ciudad de México.- Para muchos, la bebida de lúpulo no tiene todas las ventajas en términos de nutrición. Lo evidencian las diferentes expresiones relacionadas con el impacto en el organismo. Si bien la cerveza ofrece en ese momento una dulce sensación para calmar la sed, depositará después un regalo en el cinturón abdominal. ¿Esto es verdadero o falso?

Cuidado con el exceso

En toda esta historia, no todo es blanco o negro. Sí, la cerveza puede engordar por dos motivos. Primero, porque no importa lo que nos llevemos a la boca, si lo hacemos en exceso, el cuerpo lo almacenará. Si el 'levantamiento del codo' es demasiado frecuente, inevitablemente nos exponemos al riesgo de ganar peso.

Contiene carbohidratos

Veamos más de cerca: La cerveza contiene alcohol, esto quiere decir que hay etanol, una molécula bastante energética. A modo de comparación, un gramo de azúcar representa 4cuatro calorías, un gramo de etanol representa siete. Sin mencionar que la cerveza también contiene carbohidratos. Entonces, cuanto más alcohólica es la cerveza que se prueba, más calórico es el líquido.

Por otra parte, se destaca la interesante composición nutricional general de la bebida. Se compone de “entre un 90 y un 95 % de agua, cereales, hidratos de carbono, sales minerales, vitaminas y alcohol. La levadura, el lúpulo y la cebada aportan vitaminas del grupo B, en particular la vitamina B12, interesante para los vegetarianos, así como la vitamina B9 (o ácido fólico), que contribuye a reducir el riesgo cardiovascular. La cebada también ofrece fibra soluble, buena para el tránsito intestinal, para regular el colesterol y el azúcar en sangre. La evidencia científica no es perfecta pero parece que el lúpulo tiene propiedades antiestrés y calmantes. Al mismo tiempo, la cerveza contiene minerales esenciales para el buen funcionamiento de nuestro organismo, como silicio, potasio y magnesio.

Presta atención al acompañamiento.

Si la cerveza consumida en grandes cantidades deja rastros, se pueden identificar otros culpables. Como el sabor es ligero, normalmente bebemos mucho. Y además, los alimentos asociados (cacahuetes, patatas fritas, etc.) suelen ser de mala calidad, muy salados y dan sed.

Por tanto, para limitar los daños, depende de nosotros saber mantener y controlar la dosis de alcohol. Pero también puedes optar por las denominadas cervezas sin alcohol, que por definición son más dietéticas. Es cierto que los cereales contienen hidratos de carbono, pero sistemáticamente contienen menos calorías porque hay menos alcohol. 

Fuente: Todo para Ellas