Todo sobre los calambres: Te contamos cómo hacerlos desaparecer cuando te atacan en la noche

Ciudad de México.- Los calambres son contracciones musculares dolorosas que son involuntarias y que pueden durar de unos segundos a varios minutos.  ¿Qué causa los calambres por la noche y cómo evitarlos? Ya sea que se produzcan en el muslo, la pantorrilla o el pie, los calambres en las piernas son repentinos, intensos y bastante dolorosos. La buena noticia es que estas contracciones musculares incontrolables suelen ser inofensivas. Ciertamente, pueden ser un síntoma de una condición subyacente, pero rara vez es así.

• ¿Quiénes son los grupos de personas en riesgo?

Cuanto mayor sea tu edad, más riesgo tienes de experimentar calambres por la noche. Una de cada tres personas de 60 años o más admite haberlos sentido al menos una vez cada dos meses. La explicación probable es que nuestros tendones (los tejidos que conectan tus músculos con tus huesos) se acortan naturalmente con la edad. Las mujeres también son más propensas a sufrirlos y esto es más válido durante el embarazo. Hasta el 60 por ciento de los adultos tienen calambres en las piernas por la noche, al igual que hasta el 40 por ciento de los niños y adolescentes.

• ¿Por qué tenemos calambres por la noche?

Los espasmos involuntarios en las piernas ocurren sobre todo cuando no estás activo o cuando duermes. Según las estadísticas, tres de cada cuatro casos de calambres ocurren por la noche. Pero, ¿por qué? Las causas exactas de los calambres por la noche son difíciles de identificar, pero se cree que la deshidratación y las deficiencias de ciertas vitaminas y minerales pueden provocarlos o hacerlos más frecuentes. Sin embargo, todavía faltan pruebas científicas para confirmarlo. Un estilo de vida sedentario o al revés, una sobrecarga de los músculos el día anterior y su incapacidad para relajarse después, son otras pistas probables.

• ¿Qué hacer en caso de calambres nocturnos?

Los espasmos en las piernas son tan dolorosos que queremos deshacernos de ellos tan pronto como llegan. Pero, ¿cómo hacerlo? No hay gestos mágicos en este sentido, pero hay algunos pasos a seguir para aliviar la incomodidad:

1.- Enderezar la pierna y flexionar los músculos de la pantorrilla: acerca los dedos de los pies a la tibia para estirar las fibras musculares. 

2.- Luego, frota suavemente la zona afectada.

3.- En caso de calambre en el muslo, dobla el pie de la pierna hacia los glúteos apoyándote en el respaldo de una silla para más estabilidad. Utiliza las manos o un rodillo para masajear los músculos contraídos.

4.- Si los calambres en las piernas no pasan, aplica una compresa caliente en el lugar o toma un baño caliente para aliviarse. También puedes tomar un analgésico sin receta como el ibuprofeno y levantar el miembro afectado.

Francamente, evitar los calambres por la noche al 100 por ciento no es posible, ya que son multifactoriales, pero hay prácticas útiles para hacerlos lo más improbables posible:

1.- Haz ejercicios para las piernas varias veces a la semana, camina tanto como sea posible durante el día o andar en bicicleta por las tardes. Estira las piernas antes y después del ejercicio físico, y de nuevo justo antes de acostarte por la noche.

2.- Mantente hidratado bebiendo al menos 30 mililitros de agua por kilo de peso corporal mientras reduces el consumo de alcohol y bebidas que contengan cafeína.

3.- No olvides tomar tus vitaminas y otros medicamentos que tu médico le haya recetado (especialmente si incluyen relajantes musculares).

4.- Elige zapatos de calidad que sean cómodos y apoyen bien el tobillo. Por la noche, levanta ligeramente las piernas y explora qué posiciones de sueño te hacen sentir cómoda.

Puedes usar una almohada para levantar los pies o para apoyar las plantas de los pies contra el cojín para que tus dedos de los pies estén orientados hacia arriba si duermes de espaldas. Si duermes boca abajo, intenta colgar los pies al final de la cama.

Fuente: Todo para Ellas