'Burnout' de los padres: Cuáles son los síntomas a reconocer y soluciones para mejorar

Ciudad de México.- ¿Qué es el agotamiento de los padres? Estamos hablando aquí del "agotamiento de los padres", lo que significa que este problema puede afectar tanto a los papás como a las mamás. Sin embargo, muchas veces son las madres las que se ven afectadas porque, por desgracia, todavía hoy son ellas las que llevan el grueso de la carga mental de la familia: la compra, el lavado de ropa, la limpieza, la plancha, los problemas escolares, etcétera.

Las madres solteras y las madres de hermanos se ven particularmente afectadas por el agotamiento de los padres. Es importante tener en cuenta que las personas que sufren el desgaste de los padres (papás o mamás) no son en absoluto "malos padres", sino todo lo contrario! A menudo son personas que dan el máximo a su familia, padres ilustrados y benévolos, pero que pierden el equilibrio en algún momento, porque la carga es demasiado pesada.

El agotamiento de los padres se define como un sentimiento de estar "abrumado" por la vida cotidiana. Está cerca del agotamiento profesional. Ya no sabes cómo 'hacer frente', te sientes totalmente 'drenada', tienes la impresión de estar sometida a tu entorno, de no tener control sobre él, pero en el contexto de desgaste parental, es una historia de vida familiar y doméstica.

Agotamiento de los padres: ¿cuál es la diferencia con la depresión posparto? 

 La depresión posparto generalmente ocurre poco después del nacimiento del bebé. Por el contrario, el desgaste de los padres puede comenzar a cualquier edad del niño. El período de 2-3 años es particularmente de riesgo, ya que el niño está pasando por una auténtica "tormenta emocional" que puede agotar a los padres y complicar la vida familiar.

¿Cuáles son los signos a reconocer?

• El padre se siente abrumado por los acontecimientos.
• Ya no sabe cómo administrar la vida de la familia y el hogar.
• Tiene cambios de humor, irritabilidad, tristeza.
• Le falta confianza en sí mismo, especialmente en lo que respecta a la educación de sus hijos.
• Se siente inútil, ineficiente, "no capaz", "no suficiente".
• No se siente (o ya no) en su lugar en la organización familiar.
• Tiene un sentimiento general y persistente de "harto".
• Quiere huir de la vida familiar.
• Tiene pensamientos suicidas.
• Pierde el control de sus emociones e incluso puede tener palabras/gestos violentos hacia sus hijos.

¿Es grave? "¡Sí!". No debes dejar que el desgaste de los padres se prolongue. El primer paso para salir de esto es atreverse a hablar de ello. No hay de qué avergonzarse, es un fenómeno que no es raro, no refleja ni una debilidad.  Intenta hablar con tu pareja, porque muchas veces se trata de una carga mental no suficientemente bien repartidas. Dile al otro: "necesito tu apoyo en tal o cual tarea". No debe quedar implícitos; cuando las cosas están claras, ¡funciona inmediatamente mejor! Luego, coméntaselo a un profesional infantil.