¿Cómo actuar después de haber comido de más? 3 consejos a seguir

Ciudad de México.- Dolor e hinchazón abdominal, acidez estomacal y sensación de pesadez en el vientre... Estos son solo algunos de los efectos secundarios a corto plazo tras ingerir demasiados alimentos. Sin mencionar que, con el tiempo, comer en exceso aumenta el riesgo de sufrir obesidad, indigestión crónica, insomnio, inflamación, presión arterial alta y enfermedades cardíacas, entre otras. 

Una de las mejores maneras de evitar comer en exceso es planificar nuestras comidas. De igual forma, debes controlar el tamaño de tus porciones e incluir en tu dieta alimentos ricos en fibra y productos que sacian por mucho tiempo, como verduras, frutas frescas, cereales integrales y carnes magras. Comer despacio mientras masticamos bien es otra cosa buena que hacer, porque nuestro cerebro tarda unos 20 minutos en reconocer que estamos llenos. Tendemos a comer en exceso cuando estamos distraídos, así que evita ver la televisión mientras comes.

¿Y si "el daño ya está hecho"? Lo primero que debes hacer es relajarte. En resumen, ¡no te preocupes! Una gran comida no arruinará su salud en general. Por otro lado, sentirse culpable por los hábitos alimenticios puede llevarte a la negación, por lo que es muy probable que caigas en un ciclo poco saludable. En su lugar, acepta la situación y toma una decisión consciente de hacer las cosas de manera diferente en el futuro. Está bien, pero ¿qué sigue? 

• Dar un paseo

Una caminata al aire libre ayudará a su digestión y ayudará a equilibrar el alto nivel de azúcar en la sangre después de comer en exceso. 

• Beber agua

Mantenerse hidratado es igual de importante para evitar comer en exceso, siempre y cuando se eviten los extremos. Es decir, bebe un vaso de agua (200-250 ml) dentro de los 30-40 minutos de una comida abundante. Beber suficiente agua no solo ayudará a tu cuerpo a deshacerse del exceso de sal que probablemente hayas obtenido de las comidas pesadas, sino que también puede ser útil para ir al baño y evitar el estreñimiento.

• Evita la siesta

Es cierto que tener ganas de dormir la siesta cuando se ha comido demasiado es bastante común, pero no es recomendable. En primer lugar, al acostarse pierde la capacidad de quemar algunas de las calorías que acaba de obtener. Además, al acostarnos con el estómago lleno, nuestra comida puede volver al esófago causando una sensación de ardor. 

Fuente: Todo para Ellas