Jardinería sin lastimarse la espalda: 5 métodos que sí funcionan y cuidan a tu cuerpo

Ciudad de México.- ¡El mantenimiento de un jardín requiere a menudo un esfuerzo físico que puede suponer un esfuerzo para la espalda! Cavar, desherbar, rastrillar, segar… son actividades que causan verdadero dolor si no tomamos las precauciones necesarias. 

• Estírate antes y después de tu sesión de jardinería

Podrías pensar que tomarse el tiempo para calentar es una pérdida de tiempo, pero en realidad es un error no prepararse físicamente. ¡Especialmente si ya eres propenso a sufrir problemas de espalda! Por eso, proteger la espalda al máximo es fundamental. Tus articulaciones , tus músculos e incluso tu corazón necesitan una fase de despertar para estar listos para el ejercicio. Por lo tanto, puedes empezar dando algunos pasos y haciendo algunas flexiones para preparar tus músculos antes de la sesión .

Ponte de pie, cruza las manos detrás de la cabeza e inclínate suavemente hacia un lado. Mantén durante 15 a 20 segundos en cada lado para estirar los músculos laterales. Y sobre todo, ¡no olvides respirar profundamente durante cada estiramiento!

• Utiliza ropa y herramientas ergonómicas

Para cuidar su espalda durante sus actividades de jardinería, es imprescindible disponer de herramientas adaptadas a su trabajo. ¡Y eso es evidente para todas las actividades físicas! Además de las herramientas, si piensas pasar una tarde agradable en compañía de tus plantas, primero asegúrate de llevar unos tenis resistentes al agua y a la tierra, o incluso botas, en lugar de chanclas.

• Herramientas adaptadas a tu tamaño

Opta por herramientas de jardinería con mangos largos y ajustables a tu altura, para limitar la inclinación excesiva del cuerpo hacia adelante. Ten en cuenta que muchos fabricantes ofrecen productos diseñados específicamente para diferentes tamaños , ¡lo que facilita enormemente las tareas a realizar! Así, eligiendo las herramientas adecuadas, podrás adoptar posturas menos restrictivas para tu espalda, protegiéndote de dolores y tensiones innecesarios .

• Levanta con las piernas, no con la espalda

Ya sea rastrillando la tierra, transportando cargas pesadas, arrodillándose o realizando movimientos repetitivos… ¡ la jardinería puede suponer un gran esfuerzo para la espalda! Por eso, para evitar sufrir un lumbago, es fundamental adoptar la postura correcta desde el principio.

Por eso, cuando levantes una carga pesada, siempre dobla las rodillas y estírese, manteniendo la espalda recta. Al mismo tiempo, contrae tus abdominales para proteger tu región lumbar. Y si estás utilizando una herramienta, como un rastrillo, una carretilla o una pala, acércala lo más posible a tu cuerpo. Y recuerda cambiar de lado periódicamente para equilibrar la carga.

• Tomar descansos y cambiar de posición

Cuando realices una actividad prolongada como la jardinería, tómate el tiempo para tomar descansos breves para permitir que sus músculos se relajen y se recuperen. Y aprovecha estos descansos para estirarte ligeramente y liberar tensiones acumuladas.

Fuente: Todo para Ellas