Conoce cuáles son las consecuencias de un déficit de vitamina B3

Ciudad de México.- La vitamina B3, si no está suficientemente presente en nuestro organismo, puede provocar problemas de salud de diversa gravedad. Las enfermedades cardiovasculares, los problemas de la piel, la fatiga latente y el descenso drástico de la libido son algunas de las consecuencias de la carencia.

Esta vitamina se encuentra directamente en nuestra dieta, especialmente en la carne blanca, los cereales, los cacahuetes, las almendras, el arroz, el pescado azul y las semillas. Dependiendo de nuestro metabolismo, las consecuencias del déficit de vitamina B3 pueden ser moderadas o mucho más graves: desde una simple indigestión o una fatiga temporal hasta la depresión. La ingesta diaria para una mujer es de unos 14 mg y si te pasas con una sobredosis de esta vitamina: Dile hola a los dolores de cabeza e hiperglucemia.

La consecuencia más compleja es la pelagra. Al perturbar el tracto digestivo, el cerebro e incluso la piel, nos debilita enormemente. El insomnio, la pérdida de apetito y la falta de energía son los tres primeros síntomas para detectar la posible llegada de esta enfermedad. También puede dificultar la digestión, con estreñimiento ocasional y algunos vómitos. Además, pueden aparecer algunos granos por todo el cuerpo y, en menor medida, puede provocar ciertos trastornos neurológicos.

Pero que no cunda el pánico, ¡no tener una rutina alimentaria rica en vitamina B3 no te condena a la pelagra! Sólo hay que ser consciente de esta enfermedad y prevenirla al máximo. De forma más general, los niveles bajos de vitamina B3 en el organismo pueden provocar bostezos, pesadez de ojos, ganas de dormitar. Para remediarlo, porque nunca es realmente agradable, nos imponemos una rutina alimentaria con productos enriquecidos con vitamina B3: ¿por qué no pechuga de pollo con una ensalada de temporada para el almuerzo? ¿O incluso un bol rico en semillas y granola?

Fuente: Todo para Ellas