Después de leer, pensarás 2 veces antes de seguir usando chanclas

Ciudad de México.- Todo es risa y diversión usando chanclas cuando las consecuencias más inesperadas llegan para cobrarnos factura. Seamos sinceras, en los días calurosos son las sandalias el único calzado que queremos bajo los pies y todas sabemos el porqué. Primero porque son lindísimas, algunas tienen tacón, otras plataforma y unas más apuestan por la clásica suela lisa. La comodidad es el segundo motivo y el tercero, pero no menos importante, es que nuestros pies pueden "respirar" y se mantienen ventilados y fresquitos. 

Por desgracia, calzar chanclas por periodos prolongados acarrea desventajas que nadie quisiera atravesar. Para que te hagas una idea, las sandalias pueden afectar la forma en la que caminamos, alterar la columna, lastimar la cadera e incluso las rodillas. Sí, sabemos que en la temporada veraniega es difícil decirle adiós a este tipo de calzado, pero después de leer todos los daños que provocan, te lo pensarás dos veces.

• Fascitis plantar.

No sólo las chanclas se relacionan con esta problemática, lo hacen todos los zapatos planos, como los famosos flats. La fascitis plantar genera inflamación de toda la fascia que conecta el hueso del talón con los dedos. Esta zona es importantísima porque mantiene el arco plantar. El síntoma principal no es agradable, ya que abarca dolor punzante cerca del talón. El tratamiento apunta a sesiones de fisioterapia, plantillas ortopédicas o cirugía. 

• Lesiones.

Como es evidente, las chanclas no aportan ningún soporte a la estructura del pie. Por tanto, un mal paso puede llevarte a un esguince de tobillo. 

• Rozaduras.

Las abrasiones son una posibilidad al usar chanclas. Las rozaduras ocasionan ardor y, por otra parte, pueden desarrollarse ampollas que, de no tratarse adecuadamente, pueden abrir paso a infecciones y gérmenes.

Fuente: Todo para ellas