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'Peeling': Conoce las complicaciones graves y quién debería prescindir de este tratamiento

El 'peeling' es un tratamiento de rejuvenecimiento que suaviza la piel tras retirar las células muertas
lunes, 23 de mayo de 2022 · 13:21

Ciudad de México.- Dependiendo de su intensidad y profundidad, un peeling puede tener peligros muy diferentes, desde un simple enrojecimiento hasta una verdadera quemadura. Mientras que una coloración fugaz no perturba la salud, la quemadura es mucho más grave. De hecho, ¿Sabías que algunos peelings requieren varias semanas de preparación con cremas antes de llevarse a cabo? Tras la operación, la piel se hincha, supura y a veces sangra, por lo que hay que cuidarla durante quince días.

  • Consecuencias negativas después de un peeling superficial:

Asimismo, tras la cirugía se prohíbe la exposición al sol durante varios meses, pues de lo contrario aparecerían manchas de color marrón. Esto puede interferir en la vida social. Por otra parte, surgen cicatrices, mismas que hay que proteger para evitar que se arranquen con el roce de la ropa. En cualquier caso, la vigilancia después del tratamiento te garantizarán una curación sin ningún inconveniente.

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El 'peeling' puede enrojecer o marcar con cicatrices la piel.
  • Complicaciones después de un peeling medio o profundo:

Al remover las células muertas a un nivel profundo, presenta mayor riesgo. Puede producirse una infección bacteriana si no se adapta el tratamiento; un herpes existente puede extenderse, sobre todo en el caso del herpes labial. Si el proceso está mal hecho o las costras se raspan, pueden quedar cicatrices blancas, marrones o elevadas. 

¿Cuándo se debe evitar el peeling?

Ciertas condiciones aumentan drásticamente los peligros del peeling: en el mejor de los casos, es ineficaz. En el peor de los escenarios, provoca manchas, cicatrices o traumatiza la piel. Evítalo si te encuentras en alguna de las siguientes categorías:

- Estás embarazada o en periodo de lactancia.

- Tienes lesiones cutáneas, como rosácea, piel sensible y/o irritada.

- Tienes eczema, herpes, herpes zóster o melasma dérmico.

- Estás tomando medicación fotosensibilizante, utilizas productos autobronceadores o vas a broncearte dentro de unas semanas al sol o con luz UV.

- Sufres de acné inflamatorio o estás en tratamiento contra el acné.