Conoce cuáles son los beneficios de comer hongos tras los 50 años

Ciudad de México.-El hongo es el alimento del otoño por excelencia. Se puede preparar en ensalada, sopa, gratinado, sartén y así beneficiarte de sus muchas virtudes para la salud.

**Prevenir el cáncer de próstata:

Un estudio japonés publicado en 2019 lo dice: después de los 50 años, los hombres que disfrutan de hongos al menos tres veces por semana tienen un riesgo reducido en un 17 por ciento de desarrollar cáncer de próstata. No se conocen las razones exactas de este fenómeno. Los investigadores argumentan que un antioxidante específico (la heterguetioneína, presente en la mayoría de los hongos) podría combatir el estrés oxidativo que se sabe que implica en el desarrollo de ciertos cánceres. 

**Aporta hierro:

Los hongos son una fuente interesante de hierro. Sin embargo, este mineral indispensable para la vida tiende a faltar en las mujeres, especialmente en tiempos de perimenopausia, donde puede haber períodos irregulares y sangrado vaginal.

Los hongos contienen 3.05 mg de hierro por cada 100 gramos como máximo, si bien esta cifra puede parecer poco impresionante, lo interesante es que no contienen phytates. Estas moléculas, que se encuentran en muchas plantas, limitan la asimilación del hierro por el cuerpo humano. Cuando los hongos se rocían con un jugo de limón (rico en vitamina C), el hierro se asimila aún mejor. 

**Mantener los músculos:

Lo sabemos, con la menopausia, la masa muscular puede disminuir y trae como consecuencias, una sensación de debilidad física y un aumento de peso. La cantidad de proteínas (2,62 g por 100 g) del hongo crudo es mayor que la cantidad media presente en las verduras crudas (1.87 g por 100 g). Por lo tanto, los hongos son aliados de elección para superar la menopausia.

**Protegerse contra el Alzheimer:

Las personas mayores que comen hongos regularmente tendrían menos probabilidades que otros de desarrollar la enfermedad de Alzheimer, según un estudio realizado en Singapur en 2019. Según los investigadores, después de 60 años, bastaría con saborear 300 g de hongos a la semana para protegerse contra el deterioro cognitivo, la primera etapa de esta patología neurodegenerativa. Se dice que varios compuestos están involucrados, entre ellos las erinacinas y las hericenonas, moléculas que desempeñan un papel en el crecimiento, la proliferación y la supervivencia de ciertas poblaciones de neuronas.

Fuente: Todo para Ellas