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Labios agrietados: Estas son las causas comunes y la forma más rápida de curarlos
Los labios carecen de glándulas sebáceas, lo cual los hace más vulnerables ante las agresiones extrasCiudad de México.- Por el lado estético, tener los labios agrietados se ve mal, pero por el lado de higiene, es peligroso debido a las bacterias y los virus. Antes de entrar en pánico, debes saber que la piel de los labios es una de las áreas más sensibles del cuerpo y la más expuesta al medio ambiente. Los labios no tienen la misma concentración de glándulas sebáceas que la piel normal y están constantemente expuestos a factores ambientales y los cosméticos. Todos estos factores pueden secar la barrera de la piel, lo que provoca irritación, inflamación y descamación.
- ¿Cuáles son las causas más frecuentes?
A medida que el clima se vuelve más frío y seco, la fina piel de los labios tiende a secarse más rápido que el resto de nuestra epidermis. Esto puede hacer que los labios se agrieten, descamen y se despellejen en ciertas áreas y cause molestias. Pero el tiempo no siempre es la causa de tus labios resecos.
Cuando hay una irritación causada por un producto o una alergia, llamada queilitis de contacto, los labios también pueden inflamarse. Estas reacciones alérgicas generalmente se deben a los pigmentos de los lápices labiales, los perfumes y los saborizantes de los alimentos.
Ha habido casos en los que la irritación proviene de los productos de belleza cotidianos. Tienes que tener cuidado al usar sustancias contra el acné, y tratar de no poner ninguna en tus labios. Estos productos están diseñados para exfoliar la piel y si caen en los labios experimentarás sequedad y agrietamiento.
- ¿Cómo curarlos?
Hidratante y reparador, estas son las dos propiedades clave que deben tener todos los productos que suavizan los labios agrietados. En la lista de ingredientes que favorecen la cicatrización podemos leer: aceite de coco, miel, aloe vera. Por ello, es absolutamente necesario cultivar esta suculenta planta en casa. No descartes la cera de abeja y la manteca de karité.
Fuente: Todo para Ellas