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Yoga al despertar: Rutina matutina para empezar el día de la mejor manera

Comienza tus días con el pie derecho después de realizar estas ejercicios de yoga tras despertar
miércoles, 12 de octubre de 2022 · 16:06

Ciudad de México.- Para empezar el día bajo el signo de la relajación, sigue cada mañana esta rutina de yoga. Es muy sencilla y estamos convencidas de que te encantará.

1.- Respirar.

Antes de empezar un nuevo día al 100 por hora, empecemos por tomarnos el tiempo de escucharnos, de aprovechar al máximo este momento para nosotras. El ejercicio te ayuda a despertarte y te da energía. La postura: sentada con las piernas cruzadas, sobre una alfombra o sobre una pequeña toalla, lo más importante es mantener la espalda recta .

Vacía los pulmones. Cierra la fosa nasal derecha con la mano derecha e inhala profundamente por la fosa nasal izquierda. Con los pulmones llenos de aire, contén la respiración durante 40 segundos. Luego tapa la fosa nasal izquierda con la mano derecha y exhala por la fosa nasal derecha. Continúa el ciclo, pero a la inversa.  Repite el ciclo varias veces, durante cinco minutos.

2.- El epicentro del estrés es el estómago.

 El masaje de este último facilitará el funcionamiento de los órganos y eliminará las tensiones acumuladas por el estrés. La posición: de pie, con los pies separados a la altura de las caderas. Dobla ligeramente las rodillas, inclina el tronco hacia adelante manteniendo la espalda recta y presiona las manos en el centro de los muslos. 

Vacía completamente los pulmones por la nariz. Cuando estén vacíos, aprieta la barriga como si quisieras pegarla en la espalda. Aguanta la contracción el mayor tiempo posible, sin respirar, sin forzarte, es importante permanecer en tu zona de confort. Inhala mientras sueltas el vientre. Haz esto varias veces durante tres minutos.

3.- Estirar la parte superior.

Los movimientos despiertan el cuerpo, oxidado al despertar tras la noche. El estiramiento estimula la circulación sanguínea y libera endorfinas (hormona del bienestar). La posición: de pie, con los pies separados a la altura de las caderas.

Estirar el cuerpo creciendo lo más posible, brazos estirados hacia arriba, talones levantados, sin arquear la espalda. Mantén la posición durante tres respiraciones. Vuelve a bajar durante la última exhalación. Todavía de pie, levanta el brazo izquierdo, dobla el tronco hacia la derecha y luego repite el estiramiento del otro lado.

Fuente: Todo para Ellas

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