El error que se debe evitar después de que olvidas regar a tus plantas; las estás perjudicando

Ciudad de México.- Las plantas de interior aportan un toque de naturaleza relajante a nuestros espacios vitales, pero su mantenimiento puede ser complicado, especialmente cuando te olvidas de regarlo. Ante esto, nuestro primer instinto muchas veces es inundarlas para compensar la falta de humedad. Sin embargo, esta reacción instintiva puede en realidad causar más daño a nuestras preciadas plantas.

Regar tus plantas no es suficiente

El cuidado de las plantas de interior va mucho más allá de regarlas. Cada especie vegetal tiene requerimientos de riego, luz y humedad. Tómate el tiempo para conocer las características de tus plantas para poder brindarles el ambiente óptimo.

Luego, en lugar de reaccionar al azar, desarrolla un programa de riego basado en las necesidades de cada planta. Algunas prefieren un suelo más seco entre riegos, mientras que otras necesitan una humedad constante. Antes de regar, introduce ligeramente el dedo en la tierra para medir la humedad. Si la tierra todavía está profundamente húmeda, espera un poco antes de regar. Un suelo constantemente empapado puede provocar la pudrición de las raíces.

Opta por macetas con orificios de drenaje para evitar que el agua se acumule en el fondo. Un buen drenaje es fundamental para evitar humedad estancada y problemas de raíces.

El error de riego que todos cometemos

Si notas signos de deshidratación en las plantas, por falta de riego o por altas temperaturas, la primera reacción suele ser regarlas abundantemente. Sin embargo, esto puede resultar contraproducente y llevar a cometer un error grave, como… olvidarse de quitar las hojas muertas antes de regar.

Cuando las hojas de tus plantas comienzan a marchitarse y morir por falta de agua, es fundamental quitarlas antes de regar tus preciadas plantas. Las hojas muertas no se recuperarán y dejarlas en la planta sólo aumentará el riesgo de enfermedades y moho. Además, requiere una energía sustancial y constante de tu planta, que intentará en vano revivir las hojas muertas que aún quedan.

Fuente: Todo para Ellas