Vacaciones
¿Ya lo sabes? Estas son las 2 razones por las que sentimos que el tiempo de vacaciones vuela
¿También tienes la impresión de que en vacaciones el tiempo pasa volando a una velocidad vertiginosa, especialmente en verano? Es normal, imagina que hay razones científicas para este fenómeno.Ciudad de México.- ¿Tienes la sensación de que las vacaciones no han hecho más que empezar cuando ya están llegando a su fin? Siempre es la misma historia. Pero ¿a dónde van estas semanas que esperamos todo el año con tanta impaciencia? Debes saber que no eres la única que tiene la impresión de que todo pasa mucho más rápido de lo normal cuando llega la hora de las vacaciones. Resulta que nuestra percepción del tiempo fluctúa según diferentes criterios, de los cuales aquí están los dos principales:
1. Interrupción de la rutina.
El tiempo transcurre de forma continua y sin fluctuaciones, es nuestra percepción de él la que evoluciona según el contexto en el que se desarrolla nuestra vida cotidiana. En la vida cotidiana, el cerebro no necesita hacer ningún esfuerzo particular: la rutina es familiar, repetitiva, casi automática. Cuando la rutina se pone patas arriba por completo (como puede ser en vacaciones), ocurre más o menos el mismo fenómeno. El cerebro se desorienta y el tiempo parece volar más rápido. En cualquier caso, estamos hablando de distorsión del tiempo. Sin embargo, cuanto más lo pasamos bien, más se acelera este fenómeno. Por el contrario, cuanto más aburrida estás, más parece que el tiempo se ralentiza.
2. Impaciencia y anticipación.
En efecto, resulta que cuanto más impacientemente se espera un momento preciso, más larga parece la demora hasta llegar a él y, por el contrario, más corta parece la duración del evento en cuestión. Pero eso no es todo; también es este fenómeno de anticipación el que nos obliga a pensar en volver cuando las vacaciones aún no han terminado: compras de alimentos por planificar, preparación para el inicio del año escolar, cita pendiente. Inevitablemente, este tipo de pensamientos no ayudan a prolongar nuestra percepción del tiempo de vacaciones, que acortamos sin saberlo, mostrando ansiedad.
Ahora ya sabes que la combinación de estos dos fenómenos da la sensación de que las vacaciones ya están llegando a su fin cuando apenas han comenzado. El mejor consejo que podemos darte para la próxima vez: ¡déjate llevar! Pase lo que pase y como lo abordes, el tiempo pasará. Por lo tanto, también puede aprovechar al máximo el momento presente y concentrarse en la duración real del evento, sin estropear el placer pensando que, de todos modos, el tiempo siempre pasa demasiado rápido.
Fuente: Todo para Ellas
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