Llévalas a tu cocina sin temor: Conoce algunas "malas hierbas" que son comestibles y seguras

Ciudad de México.- Todos estamos programados para considerar las malas hierbas como una plaga del jardín. Aunque esto es algo cierto y los jardineros consideran a las malas hierbas su archienemigo, junto con los topos, las ardillas y las ratas… Algunas malas hierbas pueden servir para el bien de todos. El adjetivo "malo" no debe asustarte, pues muchas de ellas tienen propiedades medicinales. ¡A continuación hay una lista de malezas comestibles, todos sus beneficios y cómo usarlas! Si he despertado tu curiosidad, ¡desplázate hacia abajo en la página!

¿Qué son las malas hierbas comestibles?

Contrariamente a la creencia popular, las malas hierbas no solo están ahí para invadir nuestros jardines. No todas las malas hierbas son realmente malas. Tienen muchos beneficios para la salud e incluso pueden usarse para mejorar nuestras vidas. Entonces, ¿Cómo reconocerlas?  ¿Cómo usarlos? Estoy aquí para contarte cuáles son las mejores hierbas comestibles para que puedas incorporarlas a tu cocina y a tu vida cotidiana. ¿Estamos listas?

• Ortigas.

Que no te asuste la mala reputación de las ortigas. Sí, pueden picar, pero las hojas tiernas, si se cocinan (aunque sea ligeramente), tienen un sabor increíble. Además, su sabor recuerda a las espinacas y son un excelente complemento para cualquier sopa o cualquier otro plato. También están llenas de vitaminas como hierro, magnesio, vitamina A, vitamina C y calcio.

• Diente de león.

Si eres como Sid en Ice Age, ¡seguro que te encantan los dientes de león. Si no, y acabas de descubrir que puedes comerlos, ¡bienvenido al club! y la mejor parte de todo? ¡Puedes comer todas las partes del diente de león! Entonces, si deseas agregar colores brillantes a tus platos, esta hierba comestible con el maravilloso sabor de la rúcula se convertirá en su mejor amiga. Al igual que la ortiga, el diente de león contiene muchas vitaminas como K, C, A, magnesio, hierro y calcio.

• Amaranto.

El amaranto comestible, sorprendentemente, es una buena fuente de proteínas, pero no solo eso. Estas malas hierbas están llenas de magnesio, hierro, potasio, zinc y fibra. También se ha comprobado que reducen el colesterol, la inflamación y, de hecho, suprime el apetito, lo que puede ayudar con la pérdida de peso difícil. Puedes comer las semillas de amaranto o cocinar las hojas. Las hojas tiernas se pueden comer crudas en ensaladas si se lavan adecuadamente.

Fuente: Todo para Ellas