Injertar un limonero: Te contamos cuándo hacerlo y el proceso para lograrlo como profesional

Ciudad de México.- Siempre pensamos que cultivar limoneros será demasiado difícil o no funcionará en absoluto. Pero debemos tratar de saber que no es un milagro tener limones en nuestro jardín. Sobre todo, es importante comenzar a cultivarlos correctamente desde el principio para tener la mejor oportunidad de obtener hermosos y deliciosos limones. 

Todo jardinero sabe que injertar un limonero es un excelente comienzo para los cítricos. El injerto permite hacer crecer un árbol mucho más rápido y obtener mejores resultados. Pero dirás: "Nunca he tenido un limonero, entonces, ¿cuándo injertar un limonero y cómo funciona exactamente?" 

Hablando contigo de un trasplante, puedes imaginar un proceso complejo reservado solo para profesionales de la jardinería. Pero ten la seguridad de que este no es el caso en absoluto. El injerto es un método de tomar un capullo de una planta y esencialmente incrustarlo en el exterior de un árbol con un sistema de raíces ya establecido. 

¿Cuándo injertar un limonero y cómo?

El comienzo del verano será el momento perfecto para comenzar el proceso de injerto. Algunos recomiendan que se haga en pleno verano, pero el calor podría resecar el injerto, y además con el calor que hemos visto en los últimos años el riesgo está aún más presente. 

Para el proceso de injerto necesitarás:

• Un espacio limpio de preferencia no al aire libre para trabajar.
• Un limonero saludable para tomar el injerto.
• Cinta en ciernes.
• Un limonero huésped joven con raíces bien establecidas, ya acostumbrado al clima. Este será tu patrón y es tan importante como el injerto.
• Un poste de injerto desinfectado.
• Sellador de heridas de árboles.
• Kit de trasplante para principiantes pequeño y económico que también contenga la mayor parte de este equipo.
• Un buen par de guantes de jardín.

¿Cómo injertar un limonero?

Busca cuidadosamente la madera de los cogollos. Considera evaluar el vástago en busca de un tallo en ciernes que se esté endureciendo, ya que eso es lo que necesita cortar del árbol. Corta este cogollo de unos 25 cm de largo y quita todas las hojas. A partir de este momento, ¡el tiempo es precioso! Injerta el cogollo lo antes posible.

Cuando sea el momento adecuado, corta verticalmente 3-4 cm en la corteza del patrón en un tallo sano. Luego en la base, hacemos otro corte horizontal para formar una T invertida. Cortar con delicadeza solo para poder levantar los dos colgajos de corteza. Hasta aquí nada complicado, así que ahora une el cogollo al portainjertos. Empuja el pozo hasta que la cinta de corteza esté completamente encerrada en la T. El objetivo es asegurar el mayor contacto posible entre la corteza y la pulpa de las dos plantas. Actúa como si estuvieras pegando dos piezas de porcelana, de hecho, estás fusionando dos pedazos de vida. 

Envuélvelo con cinta, dejando el cogollo expuesto. Dé varias vueltas por encima y por debajo del área injertada, ya que esto asegurará el contacto entre la carne. Esto asegurará una buena fusión y una buena humedad entre las plantas y al mismo tiempo mantendrá el equilibrio de este frágil trabajo. El resto sucederá con el tiempo y con su cuidado y paciencia. 

Fuente: Todo para Ellas