Hablemos acerca de los celos: ¿Cómo abordarlos para no arruinar una relación?

Ciudad de México.- Tu pecho se contrae cuando tu pareja sale sin ti, tus ojos se entrecierran para mirar su teléfono a la menor notificación y tu garganta se obstruye cada vez que habla con alguien del sexo opuesto. Eres víctima de lo que se llama celos. Pero ten cuidado, aunque los celos son una reacción normal en una relación, pueden volverse poco saludables y abusivos muy rápidamente, lo que podría poner en peligro el romance. 

Si tendemos a pensar que los celos son una prueba de amor, rápidamente pueden revelar una falta de confianza en uno mismo y en la persona con la que estamos. Así que aquí está cómo luchar contra ese sentimiento que podría dañar la relación.

¿De dónde vienen los celos enfermos?

Como cualquier problema que tengas contigo misma, el primer paso para sanar es tomar conciencia de las cosas. A veces negamos nuestras propias reacciones. Por vergüenza, reprimimos este sentimiento, y esto tiende a empeorar las cosas. Entonces, para luchar contra los celos patológicos, es fundamental aceptar que estos son fruto de nuestra imaginación, y que somos capaces de controlarlos. 

Los celos son una emoción (breve) o un sentimiento (duradero) que surge cuando perdemos algo por otra persona. La posesividad y el control son muchas veces la respuesta conductual a lo que le está pasando. Por miedo a perder, va a controlar más.  Claramente, debido a que tememos perder a nuestra pareja, tendemos a imaginar los peores escenarios posibles a la menor oportunidad.

¿Cómo deshacerse de ellos?

Una vez que aceptamos que sentimos celos, existen unos pasos que nos permiten controlarlos, o al menos, que no agobien el noviazgo. Lo más importante es hacer de tu relación un lugar seguro , donde puedas hablar de cualquier cosa sin miedo. Así, una vez establecido el diálogo, puedes hablar de tus preocupaciones, incluso las infundadas, con calma. 

El segundo paso es trabajar en su confianza en ti. No busques reprimir este sentimiento, sino más bien aprende a vivir con él y a dominarlo. Es parte de ti, y en las manos adecuadas, no hará ningún daño. Como resultado, en todos los aspectos de tu vida, aprende a valorarte. Así ya no te sentirás reemplazable y estarás menos celosa.

Fuente: Todo para Ellas