Te compartimos la receta de un desmaquillante sólido y cómo emplearlo

Ciudad de México.- El desmaquillante sólido es un excelente tratamiento para pieles secas, sensibles, intolerantes y reactivas. Para elegirlo bien y usarlo a diario, sigue nuestra guía. 

¿Por qué usar un desmaquillante sólido? Rico en aceites vegetales (como el aceite de coco, aceite de jojoba, aceite de avellana, aceite de ricino), en manteca vegetal (manteca de cacao, manteca de kokum), y sin colorantes, perfumes, ni conservantes, el desmaquillante sólido elimina fácilmente el maquillaje (incluso el resistente al agua) y las impurezas, al mismo tiempo que hidrata la piel. Por lo tanto, este tratamiento está especialmente recomendado para pieles secas y sensibles. 

¿Cómo elegirlo?

Si es posible, como con todos los productos cosméticos, privilegia siempre el material orgánico, vegano (que garantice la ausencia de cualquier materia animal en su composición, y que además asegure que el producto no ha sido testado en animales). En su lugar, prefiere ingredientes naturales, biodegradables y con embalaje 100 por ciento reciclable. 

¿Cómo usarlo bien?

Para utilizar correctamente un desmaquillante sólido, empieza por lavarte las manos con jabón. Luego, moja tu cara con agua tibia. A continuación, coloca la pastilla bajo agua tibia y frótala entre tus manos para que se convierta en una solución cremosa. Masajea tu rostro y ojos con movimientos circulares durante varios minutos antes de enjuagar el desmaquillante con agua tibia. Seca su piel dándole golpecitos suaves con una toalla limpia.

Nota: para una aplicación más precisa, puede utilizar un pad desmaquillante lavable.  

¿Cómo hacer un desmaquillante sólido?

Si tienes tiempo y te gusta hacer tus propios cosméticos, nuestra receta de desmaquillador sólido casero te encantará. Para la preparación necesitas: aceite de coco orgánico, aceite de ricino orgánico, aceite de jojoba orgánico, manteca de cacao vegetal, manteca de karité, cera de candelilla.

Derrite todos los ingredientes al baño maría a fuego lento, mezclando suavemente, sin dejar nunca que hierva la preparación. Luego, espera a que la sustancia esté a temperatura ambiente.  Vierte la mezcla en un molde de la forma que prefieras. Mételo al congelador por dos horas y finalmente desmóldala. 

Fuente: Todo para Ellas