Todo lo que tienes que saber sobre la papada: ¿Por qué aparece y cómo reducirla?

Ciudad de México.- La papada es, en otras palabras, un bulto de grasa que se forma debajo de la piel. Puede ser una fuente de complejo para las personas. Por lo general, la papada puede envejecer instantáneamente una cara, por lo que a menudo buscamos soluciones para deshacernos de ella. En primer lugar, es importante entender de dónde viene.

¿Por qué tenemos papada?

Envejecimiento: a medida que pasan los años, la piel se relaja y pierde elasticidad. Sumado a la ralentización del metabolismo, los músculos del cuello se debilitan y permiten la acumulación de grasa.

-Estilo de vida: Ciertos malos hábitos pueden agravar la aparición de papada (la exposición al sol, tabaco, estrés, alcohol, alimentación, mala hidratación, falta de sueño, etc.)

-Sobrepeso: el aumento de peso puede favorecer la flacidez de la piel, sobre todo cuando no hay actividad deportiva. Por lo tanto, la grasa podrá extenderse hacia el cuello (una de las áreas más afectadas por el aumento de peso).

-Genética: esta es una de las causas más inevitables. La genética puede conducir a una predisposición a almacenar grasa en el cuello. Si tu papada es causada por la genética, lamentablemente no existe una solución natural para eliminarla.

¿Cómo deshacerse de la papada sin cirugía?

Una vez determinadas las causas de la papada, si estas no requieren cirugía estética , entonces es posible corregirla de diferentes maneras:

-Adopta una buena alimentación: Limita el consumo de alcohol, azúcares, grasas saturadas y productos procesados. Agrega actividad física a tu rutina.

-Hacer gimnasia facial.

-Una mejor postura: Un rostro demasiado caído acentuará la papada. Para evitar esto, mantén la espalda recta, levanta el mentón y deja los hombros rectos,

-Corte de cabello: Un corte de longitud media, justo por encima de la barbilla, llamará menos la atención que un peinado demasiado corto o demasiado largo.

¿Cómo hacer gimnasia facial para corregir la papada?

Coloca los pulgares debajo de la barbilla y abre la boca. Realiza una presión con los pulgares durante un máximo de 10 segundos y repite diez veces. Otro ejercicio consiste en inhalar y sonríe tan fuerte como puedas mientras mantienes la respiración. Luego,  exhala. Repite el mismo movimiento varias veces. Por último, siéntate e inclina la cabeza hacia atrás. Coloca tu lengua contra el paladar y quédate así por 10 segundos. Libera el movimiento y relaja la cabeza. Repite el ejercicio al menos cinco veces.

Fuente: Todo para Ellas