Evita que sea un desastre: Tips para pintarte las uñas con la mano no dominante

Ciudad de México.- Para las diestras, aplicar el esmalte de uñas en la mano izquierda es un juego de niños, pero es cuando tienes que usar la mano izquierda para aplicarlo en la mano derecha cuando todo se complica. Lo contrario es cierto para las zurdas que tienen los mismos problemas para aplicar el barniz con la "mano equivocada". Aquí están nuestros cinco consejos para facilitar la tarea.

1.- Saca barniz con la mano dominante.

Empapar la brochita de barniz es casi la mitad del trabajo, por lo que es más fácil usar la mano dominante para hacerlo. Esto te permite tomar la cantidad correcta. Luego basta con pasar la brocha a la mano equivocada para aplicar el barniz.

2. Mantén quieta la mano "equivocada".

Todo el mundo tiene problemas para usar la mano con mala precisión, y por ende los gestos son bruscos e imprecisos. El truco está en no moverla, en su lugar, deja que la mano dominante haga todo el trabajo. Te explicamos mejor la idea: Sujeta firmemente el pincel con la mano equivocada, acerca la uña a barnizar y deslízala presionando suavemente contra el pincel. El gesto es así más fluido y la aplicación más fácil y homogénea.

3. Pon tu mano sobre la mesa.

Poner la mano sobre la mesa te aporta más estabilidad y precisión en los movimiento. Así que no dudes en apoyarte en la mesa, ya sea sólo el dedo en el que vas a concentrarte o toda la palma de la mano.

4. Aplica el barniz con gestos lentos.

Cualquiera que sea el apoyo que tomes, debes hacer gestos lo más precisos posible. Para llegar allí, no hay más secretos que la concentración y la lentitud. Evita los movimientos demasiado bruscos y muy rápidos. Presiona lentamente el cepillo sobre la cutícula y desliza el dedo hacia atrás suavemente, sin tirones, ni sacudidas. Antes de cada gesto, asegúrate de que tu mano y el pincel estén bien colocados, que hayas tomado la cantidad correcta de barniz y tómate tu tiempo para cada paso.

5. Gira la mano, no la brochita.

Las uñas no son superficies planas, sino curvas. Por tanto, es necesario e inevitable girar ligeramente el cepillito para poder aplicar el barniz en los bordes más redondeados. Este gesto es bastante fácil cuando usas tu mano dominante, pero cuando usas tu mano "mala", la tarea se vuelve más compleja. La solución es, nuevamente, muy simple, simplemente gira la mano "buena" cuyas uñas estás pintando, en lugar de girar el pincel. El gesto es entonces más preciso y la aplicación del barniz más uniforme y claro.

Fuente: Todo para Ellas