No tires la cáscara de melón; úsala en esta receta de postre que te hará querer una segunda ración

Ciudad de México.- El melón es una de las delicias del verano. A todos nos encanta comerlo crudo y cortado en trozos, pero siempre desechamos la corteza. Te cuento que la última vez que compré melón, realmente no era bueno. ¡No era dulce en absoluto, era demasiado blando y no sabía bien! Estaba tan decepcionada y arrepentida de tener que tirar todo a la basura, que me pregunté si no sería posible al menos usar la corteza. ¿Qué hacer con la piel del melón? ¿Podemos comerlo? ¿Compostarlo o reciclarlo? Bueno, tenía razón al hacerme estas preguntas porque parece que esta parte de la fruta se puede utilizar de varias maneras. 

¡El melón es excelente para tu salud! Contiene muchas vitaminas, incluidas las vitaminas A, B1, B2, B5, C, D, E, así como fibra dietética, cromo, hierro, calcio y muchos otros minerales. Consumir melón regularmente tiene un efecto positivo en el sistema cardiovascular, el sistema nervioso y ayuda a reducir los niveles de colesterol. Sin embargo, ¿se puede comer piel de melón cruda?

Los nutricionistas desaconsejan consumir piel de melón cruda. Aunque la corteza de algunas variedades es segura para comer, sigue siendo muy dura y lamentablemente puede contener bacterias peligrosas para la salud, ya que es casi imposible limpiarla a fondo. Entre estas bacterias se encuentran la salmonela y la E. coli. Afortunadamente, todo esto no es el caso de la piel de melón confitada y ¡aquí está cómo prepararla!

Esta es una receta para chuparse los dedos. Para preparar este manjar, lava el melón en agua corriente y corta la fruta por la mitad. Retira las semillas del melón y córtalo en rodajas. Luego retira la cáscara de cada rebanada y pícala en trozos pequeños. Así es como se prepara el confitado:

Ingredientes:

• 700 gramos piel de melón.
• 600 gramos de azúcar.
• Una cucharadita de ácido cítrico.
• Hojas de menta (opcional).

Preparación:

Deposita las cáscaras de melón en una cacerola y espolvorea con azúcar. Deja de tres a cuatro horas en el frigorífico para que la corteza suelte su jugo y añade unas hojas de menta. Pon el sartén al fuego y cocínalas a fuego medio, revolviendo constantemente. Si se forma espuma blanca, sácala con una cuchara. Lleva a ebullición y espera de cinco a siete minutos. Deja el sartén en un lugar oscuro y espera a que repose durante10 horas. Añade ácido cítrico, lleva a ebullición. Deja hervir durante 20 minutos. Después apaga la estufa, y espera a que se enfríe para poder consumir el postre.

Fuente: Todo para Ellas