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¿Cómo cuidar una camelia que pierde sus hojas? Aquí te contamos

Si tu camelia está en peligro de marchitarse, te contamos cómo puedes salvarla
domingo, 5 de febrero de 2023 · 17:48

Ciudad de México.- Ya no hace falta presentar este gran arbusto de hoja perenne que florece de diciembre a marzo para las variedades tempranas y de marzo a mayo para las variedades de media temporada y tardías: la camelia. Lo tiene todo: elegante follaje verde brillante y hojas ovaladas coriáceas finamente dentadas. ¿Por qué se vuelven amarillas y se caen? ¿Cómo cuidar una camelia que pierde sus hojas?

¿Por qué las hojas de mi camelia se vuelven amarillas y se caen?

Tu camelia puede tener una deficiencia en un elemento mineral: la clorosis. Es una deficiencia de hierro que puede ser causada por muchos factores tales como: exceso de cal en el suelo, suelo demasiado básico, exceso de humedad, sequedad excesiva, suelo demasiado compacto, mal aireado y drenado, exceso de potasio, fósforo o cobre.

Desafortunadamente, debido a una o más de estas razones, se bloquea la asimilación de hierro por las raíces de la camelia. Si tu arbusto se ve afectado por esta enfermedad, sus hojas se vuelven amarillas mientras que sus venas principales conservan su tinte verde. Primero, las hojas más jóvenes se ven afectadas primero. Luego, la decoloración aparece. Finalmente, las hojas se secan entre las venas y finalmente se caen.

Es debido a esta deficiencia de hierro que se detiene el proceso de fotosíntesis. Debido a que la fotosíntesis es un proceso vital, su disfunción ralentiza el crecimiento de tu camelia y reduce su resistencia al ataque. Y consecuencia más grave, corre el riesgo de morir. La camelia puede sufrir otras clorosis. La deficiencia de magnesio, por ejemplo, provoca un amarillamiento que comienza alrededor de los bordes de las hojas más viejas. Del mismo modo, una deficiencia de manganeso conduce a un aclaramiento de las hojas con tendencia a un verde pálido.

¿Cómo cuidar una camelia que pierde sus hojas?

Para evitar que tu camelia se enferme y pierda sus hojas, debes tomar precauciones. Primero, intenta plantarlo en un suelo ácido al aire libre. Si el pH de tu terreno es demasiado alto, te aconsejamos que instales la camelia en una maceta. 

También puedes comenzar a drenar bien la tierra. ¿Cómo? Todo lo que necesitas hacer es esparcir una capa de grava o guijarros de arcilla en el suelo compactado. Del mismo modo, modifica el suelo para estimular la actividad biológica de los organismos en descomposición. De esta forma, obtendrás una tierra más rica y suelta y permitirás que tu camelia recoja todos los elementos que necesita para alimentarse.

Finalmente, en otoño y primavera, agregue compost o estiércol bien descompuesto. Después de plantar, lo mejor es optar por un mantillo de jardín siempre beneficioso con hojas muertas, corteza de pino o helechos. Luego, regar idealmente con agua de lluvia. 

Fuente: Todo para Ellas