Tostadora: Sigue esta breve guía para limpiarla y dejarla como nueva

Ciudad de México.- Por la mañana, cuando suena la alarma de tu teléfono, te levantas y conectas un dispositivo. ¿Cuál? ¡Déjame adivinar! ¡La máquina de café! ¿No? ¡Entonces, tal vez sea la tostadora! ¡Yo también! 

¿Cómo limpiar una tostadora fácilmente y con qué frecuencia para no estropear el sabor del pan tostado? 

Para que las tostadas mantengan su crujiente textura sin oler el quemado, es necesario saber cómo limpiar una tostadora de manera efectiva. La frecuencia con la que debe ocurrir esto depende de los intervalos entre los usos. Es preferible una limpieza semanal para eliminar las migajas y cualquier residuo de comida.

Necesitas todo un equipo para limpiar la tostadora. Por ejemplo, un cepillo de pastelería, un fregadero o un lavabo, una esponja o un paño, un paño de microfibra y un cubo de basura. 

En cuanto a los materiales, prepara agua caliente, líquido para lavar platos con desengrasante, bicarbonato de sodio, vinagre blanco destilado, esponja de melamina.

Para tu seguridad y la del aparato, desconecta y enfríe si se ha utilizado recientemente.

No te apresures a limpiar el exterior hasta que lo hayas hecho en el interior.

Para comenzar la limpieza en profundidad, saca la bandeja extraíble y utiliza un pincel para barrer las migas. Para que esta actividad no te cause molestias adicionales, limpia sobre la basura. Si tienes un fregadero con triturador de residuos, puedes sacudir las migajas

Una vez eliminados los grandes residuos, prepara la solución de limpieza mezclando agua tibia y líquido para platos. Si la tostadora está equipada con una bandeja de recogida de migas extraíble, sumergirla en agua jabonosa, dejarla en remojo un cuarto de hora y lavarla bien con una esponja o un paño. Después, enjuagar con agua y limpiar con un paño absorbente.

Tal vez el pincel de pastelería llegue a las migas quemadas que se han pegado al interior. No pongas los dedos en las ranuras para no lastimarte ni dañar las habitaciones interiores. Si es posible, trabaja desde la parte superior e inferior del aparato.

A continuación, sumerge una esponja o un paño en agua jabonosa para limpiar el exterior de la tostadora. Escurre el agua para que la esponja esté simplemente húmeda. Presta especial atención a las esferas o palancas de los mandos, así como a los mangos. 

El secado con un paño suave de microfibra es importante antes de enchufar.

Fuente: Todo para Ellas