Elimina el famoso olor a "choquía" de los trapos con este truco casero

Ciudad de México.- Tener la cocina limpia es súper importante. Es ahí donde compartimos momentos con la familia, picamos las verduras, sazonamos las sopas y preparamos las carnes. Lo ideal es que todo se encuentre en óptimas condiciones. Para asear, uno de los aliados es el pañito. Pero, ¿Qué pasa cuando en vez de ayudarnos, empeoran todo?

¿Te ha pasado que pasas el trapo por alguna superficie y huele mal? Todas conocemos ese olor entre huevo y humedad que a nadie le gusta. Se le conoce popularmente como "olor a choquía". No importa qué tanto vuelvas a "limpiar" la mesa o los muebles, si lo haces con el mismo trapo, el resultado será similar. Y es que el problema está, justamente, en el pedazo de tela, no en los productos aromatizantes que usas o en los muebles.

Este fenómeno se asocia a trapos mal lavados o secados. Por fortuna, siempre hay consejos para solucionar cualquier desperfecto que se relacione con la higiene del hogar. Lo mejor es que el método no es para nada complicado, ni se necesitan materiales caros. De hecho, lo más probable es que ya tengas en casa todos los artículos. Toma papel y lápiz para que no te pierdas de ningún detalle.

¿Qué materiales debo reunir?

-Agua caliente.

-Tres cucharadas de bicarbonato de sodio.

-Una taza de vinagre blanco.

-Detergente para ropa.

¿Cómo se hace?

Primer paso: Vierte el agua caliente en una cubeta. En ella, incorpora el bicarbonato de sodio y también el vinagre. Con una palita, remueve los ingredientes. Notarás que ocurre una reacción. Habrá que esperar a que deje de burbujear.

Segundo paso: Sumerge los trapos que tengan mal olor y déjalos reposar en la mezcla durante 30 minutos. Una vez pasado este tiempo, frótalos dentro de la cubeta. 

Tercer paso: A continuación, remójalos en agua limpia por cinco minutos. ¡Ya casi terminas! Posteriormente, lávalos con detergente y enjuágalos muy bien. Para finalizar, cuélgalos en un sitio donde reciban los rayos del sol. Esto garantizará que se sequen a la perfección. Evita tenerlos en un lugar cerrado, puesto que podrían conservar olor a humedad.

Como consejo adicional, lava los trapos enseguida que hayas terminado de limpiar una superficie sucia. Si no lo haces, se acumularán bacterias y la tela se convertirá en un foco de infección. 

Fuente: Todo para Ellas