Enfréntate a una mancha de cloro sobre la ropa con estos tips y recupera el color original

Ciudad de México.- El cloro mancha, desinfecta y desodoriza. Pero también puede ser el peor enemigo de tu ropa de color. Una pequeña salpicadura de producto puro y está garantizada la decoloración. Por eso debe manejarse con cuidado. Pero cuando el daño está hecho, ¿qué se puede hacer? Hemos ideado tres consejos para compensar las manchas de cloro.

¿Le ha caído una gota de lejía en los pantalones mientras lavabas el baño? Si es blanco, no hay daños. Basta con aclarar el tejido con agua tibia. Si está teñido, limpia inmediatamente el tejido con un paño empapado en peróxido de hidrógeno o amoníaco. Este consejo funciona con tejidos de algodón, lana o sintéticos. Asegúrate de tener guantes y una máscara protectora. Aclara y lava la prenda en la lavadora. La mancha de lejía se neutralizará.

¿Te diste cuenta demasiado tarde? Si es vieja, una mancha de lejía no desaparecerá. Eso no significa que tienes que conformarte. ¿Por qué no solucionarlo? Puede que no hayas pensado en ello. Lo único que tienes que hacer es elegir un rotulador textil permanente del color de tu ropa y colorear suavemente el tejido donde está la mancha de lejía. En poco tiempo, la mancha será invisible a simple vista. Este consejo es especialmente eficaz en la ropa negra.

La última solución de camuflaje si la lejía ya ha dejado una marca amarillenta en tu ropa es volver a pintar la ropa. En agua hirviendo o en agua fría, esta solución requiere un tiempo de aplicación preciso y una correcta dosificación de los productos. Para saber cómo hacerlo, sigue la etiqueta del producto. Por cierto, ¿por qué no aprovechar la oportunidad de cambiar de color y de look? ¿Estas soluciones te ayudaron?

Fuente: Todo para Ellas