Cómo
Útiles consejos para clasificar la ropa antes de meterla a la lavadora
Para evitar la decoloración, el encogimiento y otros problemas, es mejor clasificar la ropa antes de lavarlaCiudad de México.- Si hay una tarea de la que no puedes escapar, es lavar la ropa . Es una tarea exigente, por lo que a menudo lo hacemos con prisa. Sin embargo, antes de enrollar la ropa en una bola y ponerla en la máquina, debes clasificarla. Obviamente, esto no es una obligación, pero puede ahorrarte muchas molestias. Para evitar estos inconvenientes, aquí tienes tres prácticos consejos que te ayudarán a clasificar correctamente tu ropa antes de que pase por la lavadora.
**Usar varias cestas.
Para evitar terminar con mucha ropa blanca que se ha vuelto rosa debido a un calcetín rojo que se deslizó en su máquina, haz una separación cuidadosa. Para ayudarte en esta tarea, no dudes en utilizar varios cestos de ropa sucia. Reserva uno para blanco, uno para color, otro para negro e incluso uno para colores intermedios si lo deseas. Incluso puede tener uno para sus tejidos frágiles como la seda y la lana, por ejemplo.
**Revisa las etiquetas.
No siempre pensamos en ello, pero una simple lectura de las etiquetas podría haber salvado la vida de muchas de nuestras prendas. No todos los tejidos reaccionan de la misma manera en la máquina y por tanto requieren un tratamiento especial. No se lava la seda como se lava el algodón, por ejemplo. Las etiquetas te indican la temperatura de lavado, si la prenda debe lavarse a máquina, lavarse en seco o lavarse a mano. Presta especial atención a esto, sobre todo si estás a punto de lavar una prenda nueva que aún no has tenido tiempo de estrenar. Sería una pena encogerla desde el primer día.
**Lava la ropa muy sucia junta.
En aras de la eficiencia, sería más inteligente lavar la ropa muy sucia con otra ropa igual de sucia. Por ejemplo, un atuendo que se usa para la jardinería se puede lavar con el que se usa para hacer deporte. Si la ropa tiene un grado de suciedad similar, el lavado a máquina será uniforme. Por no hablar de que se puede adaptar mejor la temperatura, la cantidad de detergente y el ciclo de lavado. Por supuesto, lo contrario también funciona, ya que será mejor lavar juntas las prendas menos sucias, que necesitarán menos detergente, temperaturas más bajas y ciclos más cortos para volver a dejarlas limpias y frescas.