Forma correcta de conservar las ciruelas en el congelador; mira el paso a paso

Ciudad de México.- En la temporada de ciruelas, nos damos un festín con pasteles y hacemos mermelada para los días malos. Pero si te abruma la abundancia de la cosecha, también puedes considerar congelarlas.

Como muchas frutas y verduras , las ciruelas se pueden congelar fácilmente para usarlas más tarde en recetas gourmet, dulces o saladas. Para congelar esas frutas jugosas, elige exclusivamente aquellas que no presenten defectos de apariencia: lisas, sin manchas, ni arrugas, ni agujeritos que indiquen que están habitadas por gusanos. 

Enjuaga bien la fruta, luego sécala con un paño limpio. A continuación, colócalas, sin que se peguen entre sí, sobre una placa de horno o sobre una bandeja donde previamente hayas colocado papel de horno. Coloca este plato o bandeja en tu congelador y déjala ahí toda la noche. A la mañana siguiente, puedes despegar las frutas del papel de horno y ponerlas en bolsas, con mucho cuidado de quitarles el aire, antes de volver a meterlas en el congelador.

¿Deberías congelar ciruelas con o sin hueso?

Hay que congelar las ciruelas con o sin hueso en función del uso que se quiera hacer de ellas más adelante. Si planeas usar ciruelas congeladas para tartas, es mejor deshuesarlas antes de congelarlas. Así, a la hora de hacer tu tarta, solo tienes que espolvorear la base de la tarta con sémola fina, pan rallado o polvo de almendras y disponer los medallones de ciruelas aún congelados antes de hornear. Si se quiere hacer clafoutis de ciruelas, se recomienda congelar las ciruelas enteras, sin deshuesarlas.

Si no puedes decidir si deshuesar o no las ciruelas antes de congelarlas, la solución puede ser hacer una compota. Para congelarla, consigue un molde de silicona para cupcakes. Distribuye la compota de ciruelas en los cubitos y coloca el molde lleno en el congelador durante la noche, asegurándote de que esté plano. Ello evitará que se caiga. Si la compota se desliza por la paredes del electrodoméstico, puede ser difícil de limpiar. Al día siguiente, desmolda los cupcakes de compota de ciruelas, y mételos en bolsas que volverás a meter en el congelador.

Fuente: Todo para Ellas